Reduce calorías

Si no puedes con las rutinas de pérdida de peso, es porque tus hábitos no han cambiado lo suficiente. Lee el siguiente artículo, en el que explicamos las 21 formas en que puede reducir hasta 500 calorías por día. No es imposible intentarlo.

Bajar 500 calorías por día.

No comas frente a la tv

Según un estudio, esto hará que comas casi 300 calorías más, porque no estarás prestando atención a lo que ingieres. En vez de ello siéntate a la mesa a comer, sin el TV prendido y en lugar de quedarte mirando una película, aprovecha ese tiempo para dar un paseo.

¿No es que las ensaladas son lo más sano que hay? Si, pero con algunas licencias. Si le colocamos fetas de jamón o queso, tocino, frutos secos, vinagretas, mayonesa, frituras, etc, pueden hacer que subas bastante de peso. No más de cuatro ingredientes está bien.

Platos pequeños

Utiliza uno de dimensiones menores que el que estás acostumbrado. Así, colocarás menos comida en él. Si te han enseñado a “comer todo lo que hay en el plato”, esto te servirá para ingerir menos.

Siempre activo

No te quedes todo el día sentado frente al ordenador o la televisión. Mientras hablas por el móvil, por ejemplo, camina alrededor de la sala o de la oficina, mueve tus piernas y pies al compás de una canción en la mente, todo sea a favor de evitar la quietud.

Menos frutos secos

Sobre todo si se encuentran en un gran recipiente. Según los investigadores, cuánto más grande la porción, más se come. Si bien las nueces son buenas para el corazón, tienen una gran cantidad de calorías (1 puñado contiene 175 calorías). Si te gustan mucho puedes optar por los pistachos, ya que la misma cantidad dispone de 80 calorías.

Prefiere los expreso

Los tamaños de los café que venden en las tiendas hoy en día son excesivamente grandes. Una de esas tazas pueden contener hasta 670 calorías si lo ordenamos con crema o chocolate. Entonces, mejor un shot de expreso, que tiene sólo 30.

Cuenta los snacks

Si te gustan mucho las patatas fritas o las galletas, no es que estén prohibidas terminantemente. Puedes consumir una porción de 5 unidades y guardar el paquete. No te sirvas un gran recipiente porque terminarás comiéndote todo, al ser alimentos súper adictivos y deliciosos.

Menos pasta

Un plato solo (sin salsa) tiene 220 calorías. Sin embargo, si le añadimos “gusto” este valor se puede quintuplicar. Prefiere los espaguetis de harina integral, por ejemplo.

Invitar menos personas a la vez

Si comes con más de siete personas, sin dudas, tu ración será más grande. Es que cuando esperamos tanta gente en casa, nos preparamos como para el doble o el triple, pensando que nada alcanzará.

No limpiar el plato

Un experto en pérdida de peso dice que hay que dejar el 25% del plato lleno. Pueden ser las sobras una buena comida para el perro o bien, como un almuerzo el siguiente día.

Sirve fuera de la mesa

Anteriormente, las familias se sentaban frente a una gran bandeja de pastas o carnes. Esto hace que quieras servirte una y otra vez. En cambio, si optas por servir los platos en la cocina y llevarlos a la mesa, reducirás las ganas de seguir comiendo.

Di “no” a los cocktails

Un solo vaso contiene jarabes, adiciones cremosas, zumos enlatados y azúcares. Es decir, casi 800 calorías. Evita las bebidas de ese estilo y prefiere los zumos naturales o los que tienen cítricos.

Pedir menú pequeño

En las casas de comidas rápidas por ejemplo, nos ofrecen agrandar los combos y eso es malo para nuestra salud. Lo mismo ocurre en algunos restaurantes. Una porción compartida de patatas fritas o de postre te ahorrará muchas calorías.

Es mejor que la comida esté preparada con agua o caldo antes que con aceite, ya que cada cucharada aporta 124 calorías.

Dormir lo suficiente

Las personas que duermen menos de 7 horas por día comen más, según una reciente investigación. Si no se duerme siesta, se merienda, por ejemplo. Ahorra 100 calorías durmiendo.

Sé anfitrión en las reuniones

La tarea de ir al supermercado, cocinar, limpiar, poner la mesa, etc hace consumir muchas calorías, por lo que invitar gente a casa es una excelente idea para “permitirse” el helado de postre.

Cero gaseosas

Un vaso de una bebida azucarada tiene casi 200 calorías. Si bebes dos o tres estarás pasando los límites. Nada mejor que el agua para saciar la sed.

"Llénate menos"

Es posible engañar al estómago para comer menos. Por ejemplo, antes de almorzar o cenar beber una taza de caldo bajo en calorías para luego ingerir menos alimentos.

Presta atención a las señales

El estómago “avisa” cuando ya está satisfecho. Es bueno que escuches este signo. En lugar de mirar el plato, revisa primero tu cuerpo. Él te sabrá decir cuando parar a tiempo.

Bebidas sin azúcar

Aunque estés bebiendo un té, si le echas varias cucharadas de azúcar, engordaras. Opta por otros endulzantes naturales como la stevia o aprende a añadir menos azúcar a tus infusiones.

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